Siempre que subo recuerdo lo mismo. Los pensamientos son los mismos. El primero es para la ingeniería romana. Mentalmente me voy al acueducto y como no sé si en época de Trajano se conocía el fenómeno de vasos comunicantes, me quedo sin saber sí el acueducto se pudo evitar y sustituir por un conducto cerrado. sobre el propio desnivel que salva, sin necesidad de las arquerías. Creo que sí que se conocía el fenómeno. Pero lo seguramente decidió fue que los materiales conocidos entonces no soportarían las presiones hidráulicas. El caso es que vencieron a las fuerzas telúricas en beneficio de la población que fue abastecida de agua.
El caso de la calzada es tremendo. No existió paso a través de Guadarrama, lo que antes llamábamos Cordillera Carpetovetónica, salvo el de la calzada hasta metidos en el siglo XVIII en que se abrió el Alto de los Leones ( yo seguiré diciendo de los Leones mientras viva, pues la gesta no la olvido, ni la de unos, ni la de otros ). Los pasos por Somosierra y por Navacerrada son posteriores. Una vez leí que es difícil entender que la subida fuese por donde la conocemos, pues otros trazados por el mismo valle son mucho más cómodos. Pero estos trazados aparentemente no tienen piedras de sillería perfectamente trabadas. La calzada en ciertos tramos sí. ¿Será que la calzada no era una calzada, sino una atarjea o descarga de aguas residuales?. Esto no tiene sentido a mi juicio, pues el propio río cumpliría con este fin. Por otra parte la anchura es sobredimensionada para personas y caballerías y si que tiene tamaño para carros. Aunque es duro de aceptar que un carro pudiera subir por las pendientes que hoy conocemos. Por otra parte creo que la altitud es en este paso la mayor de todas las de los diferentes pasos. Esto tampoco ayuda mucho a aceptar la situación. Pero por otra parte están los dos puentes, que si bien son reconstruidos, por algo se reconstruirían. Lo que si hace la calzada es un zigzag que nos hace ver el río unas veces a un lado de la marcha y otras al otro lado, esto es para suavizar la pendiente, lo que no se hace pensando en bajada de aguas.
Bueno. Que siempre me quedo igual. Y siempre pienso lo mismo de los ingenieros romanos ( lo hago con visión de hoy ). No se si sabían mucho o un poco menos que mucho. Pero si sé que resolvían los problemas. Y lo mismo que llevaron el agua, facilitaron el paso a las personas. Abrieron paso a la civilización. A una civilización que venía de Roma. Imperio que aglutinó las bondades de las civilizaciones que conquistó. Que extendió su habla, su derecho, sus costumbres. Y que a nosotros los españoles nos hizo ciudadanos del Imperio lo que supuso la unidad de los pueblos de la Península en diferentes territorios. Que, a favor o en contra, permitió la difusión del cristianismo en su versión helenística. Y de forma definitiva, con sus periodos negros, consolido la unidad de los pueblos de Iberia.
Los romanos, o sea nosotros mismos, forjaron y forjamos un Imperio. Luego ese Imperio se dividió, bien porque era difícil de controlar o bien para dar satisfacción a herederos diferentes. Luego pasó lo que paso y los bárbaros, que no eran tan bárbaros, se hicieron con la situación. Primero en Occidente y mil años después en Oriente.
Escribo todo esto para que sirva de reflexión, de unos y de otros. Abrir caminos, extender la civilización es forjar imperios. Encerrarse en si mismos, destacar lo peculiar frente a lo común , ensalzar el aldeanismo y la paletería frente a lo universal es derribar los imperios, o las naciones. ¡ Cuidado! Que hoy puede haber similitudes. La idea debe ser ir siempre hacia delante, nunca hacia atrás.